Voy a Medellín cada 15 días por trabajo y me encanta cada vez quedarme en un hotel diferente, este hotel está bien ubicado si quiere cercanía a sitios de fiesta, pero debe tener claro que las habitaciones estándar son demasiado pequeñas, el desayuno cobran 90 mil y es de verdad deprimente, una bandeja con fruta llena de moscos, huevos, cereal y ya, para un desayuno de este nivel jamás pagaría 90 mil pesos.