El hotel es bonito, el ambiente es tranquilo, la gente es amable. La ubicacion tambien es muy buena, 15 min a pie de la universidad. No ofrecen comida lo que es una pena porque los domingos y lunes muchos lugares estan cerrados. Afortunadamente, justo en la esquina se encuentra el Carpe Diem cafe que es bueno para desayunar ligero (cafe, te, y pan). El unico pero que le encuentro al hotel es la limpieza de las habitaciones, el primer set de toallas de mi habitacion estaba sucia, encontre cabellos. Como ya habia leido los reviews, decidi no complicarme y compre mi propia toalla. Las del bano las reemplazaron a los tres dias. Espero la administracion ponga atencion a estos detalles, el hotel tiene todo el potencial para incrementar su categoria.