Hotel muy sencillo. La cama es cómoda, eso sí, no sabemos el motivo pero solo suministran una manta, solo estaban las sabanas bajeras y la manta.
Tienen aire acondicionado que si les indican con antelación se lo enchufan para que cuando lleguen esté fresca la habitación.
Ahora bien, lo primero, igual es que al ser europeos estamos acostumbrados a unos mínimos entre ellos, que haya agua caliente y jabón para ducharse(aquí había una pastilla de jabón de tocador).
Segundo, es el segundo hotel en el que estamos en Nicaragua y los enchufes donde cargar tu móvil o lo que sea, brillan por su ausencia.
Eso sí, tienen parking interior lo cual se agradece a la hora de estar tranquilo con el coche.
En cuanto al personal, son amables y muy serviciales.